¿Seguro que no son bonsáis?

Eso es lo que me dice la ocurrente de mi señora de las pobres plantitas. Y es que así están con semanitas. Han tenido unas condiciones climáticas inmejorables y un buen sustrato, y esto es todo lo que dan de sí. Quizá mi memoria me traiciona, pero yo creo que otros años esto iba más rapidito; también puede que sea la variedad. El caso es que ahora me arrepiento de haber hecho experimentos con la Petite, que en comparación, no iba tan mal.





Pese a que efectivamente, se ha quedado como bonsái, la Buble Gun promete unos bonitos cogollos que podemos apreciar aquí en miniatura.




Y esto de aquí abajo es el colmo de la mala suerte. Que no brota, que no brota, hurgo y veo que esta echa un lío, la he traído hacia la luz tal y como lo hubiera hecho Caroline. Pero me temo que va a ser en vano.


Mientras el resto de mi pequeño jardín de azotea pasa por su primavera más florida y fructífera. Pensaba hacer un blog/flog del resto de mis plantas, pero no quiero gafarlas también.