Los niños tienen pene, las niñas vulva...

...y los hermafroditas un poco de todo. ¿Sabéis que esto lo enseñan ahora en preescolar?

Nosotros somos más de la generación de barrio sésamo... - "Hola, soy coco y con las fotos de la desgracia machuna que me salió el año pasado y otra que he sacado de por ahí, os voy a enseñar la diferencia entre los niños y las niñas. "

Los niños, como no podría ser de otra forma, tienen flores masculinas o machunas, que son como racimos de meloncitos. Su floración es profusa y muy espectacular, pero amigos, llegado el momento, se abren liberando cantidades ingentes de polen a la caza de niñas a las que ventilarse. ¡MALLL!, nos deja preñadas a las niñas y que clase de padre seríamos si permitiesemos eso.

En estas dos fotos, creo que queda bastante claro como son estas flores masculinas.





Las preflores femeninas son más discretas. La niñas suelen tardar más en definir su sexualidad que los machos y sus flores son tan sutiles y escasas que cuesta un huevo verlas, sobre todo a mí que soy un puñetero topo. Nacen en las bifurcaciones de las ramas, pegadas al tallo y están formadas por un cáliz del que brotan dos pelitos blancos.

Las plantas hermafroditas, tienen a la vez flores femeninas y masculinas, por lo que hay que estar muy atentos, e ir amputando estas últimas para que no se nos preñe a si misma en un acto que fuese más allá de lo incestuoso.

Esta persecución a los machos tiene una base racional. Cuando se cultiva esta planta para que algún día pase a formar parte de uno mismo y no con fines ornamentales o meramente científicos, se ha de tener en cuenta, que los machos apenas producen THC y las hembras preñadas dedican sus energías a la producción de semillas en lugar de a la de esta sustancia. Es por ello que debemos talarlos, con tristeza en cuanto a criaturitas a las que hemos visto crecer, pero sin piedad.